A pesar de haber anunciado, en campaña y ya como presidente, que dejaría que los sirios mismos decidan su futuro, en abril pasado Donald Trump dio un rudo golpe de timón en su política exterior. Atacó posiciones del gobierno sirio con misiles, luego de que se produjo un ataque con armas químicas en la provincia de Idlib, presuntamente perpetrado por las fuerzas del presidente Bachir al Assad. En este vídeo exploro los móviles del ataque, sus posibles consecuencias y qué situación se configura a nivel internacional a partir de esta decisión del presidente republicano. El pronóstico en esta parte de Medio Oriente sigue siendo nebuloso.

Además de atacar Siria, el gobierno de Trump también atacó una zona de Afganistán, donde estarían ocultas huestes del ''Estado Islámico' (ISIS, por sus siglas en inglés). Y envió buques de guerra a la península de Corea, en momentos en que Kim Jong Un, el presidente norcoreano se mostraba amenazante. No hay forma de saber si Trump alimentará esta escalada o de pronto bajará los decibeles de su verbo y sus acciones bélicas.